Luego de culminar en el año 2020 el proceso de formación modular en salud mental y apoyo psicosocial para personal técnico que atiende a grupos de población vulnerable, el programa ALTERNATIVAS ha iniciado un estudio para la medición de impactos que esta formación ha tenido en las instituciones que participaron en el proceso. El estudio se realiza de forma simultánea en los tres países donde se implementa el programa, es decir, Guatemala, Honduras y El Salvador.
A través del estudio se busca conocer en qué medida han mejorado los servicios brindados, sobre todo a niñas, niños y jóvenes que se encuentran en riesgo de migración irregular o que han sido retornados. En el caso de El Salvador, fueron 35 funcionarios y funcionarias del Consejo Nacional de la Niñez y de la Adolescencia – CONNA y que laboran en diferentes municipios del país, quienes los días 20 y 27 de septiembre participaron en la realización de este estudio a través de la cumplimentación de un cuestionario mediante el cual se podrán extraer diferentes conclusiones acerca del impacto logrado en los y las beneficiarias.
ALTERNATIVAS se implementa siguiendo un modelo de impactos, los que a su vez son objeto de medición y evaluación constante. De esta forma, el programa se orienta al desarrollo de procesos de calidad y que contribuyen a una mejora continua.
La Cooperación alemana al desarrollo – GIZ, ejecuta el programa regional ALTERNATIVAS en coordinación con la Secretaría de la Integración Social Centroamericana – SISCA y es el resultado de la alianza de los países que conforman la región SICA con la República Federal de Alemania.